Cómo disfrutar MÁS
de tu sesión de masaje

1. No hablar

Hay personas que prefieren el silencio durante su sesión de masaje y otras, en cambio, prefieren mantener una conversación. Lo ideal para que aproveches al máximo tu momento de masaje es que te relajes, dejes de hablar y sientas el masaje (al menos hacia la mitad de la sesión). Si, por el contrario, es el terapeuta el que te da conversación, no dudes en expresar tu deseo de estar en silencio! 

2. No pensar

También sucede que, aunque haya personas que mantengan silencio mientras reciben el masaje, mentalmente no cesan de pensar. A veces, resulta difícil entregarse del todo a la sesión de masaje cuando tenemos preocupaciones, pero una opción sería la de que centraras tu atención en sentir las manos del terapeuta. Sería una pequeña tregua al parloteo constante de tu mente. Si este acto lo acompañas de respiraciones lentas y profundas verás que el resultado de tu sesión de masaje será sorprendente.  

 
3. Sin prisas

Lo ideal para que disfrutes plenamente de tu sesión es que acudas a tu cita sin prisas. Resulta incómodo realizar un masaje con el tiempo justo, tanto para la persona que lo recibe como para quien lo da. No siempre es posible pues vivimos esclavos del reloj pero, siempre que puedas, procura que el tiempo no sea una preocupación más. 

4. Comida suave

Después del masaje conviene que no te excedas con la comida. Sobre todo, en caso de drenaje linfático o de reflexología podal que son masajes que actuan sobre las vías de depuración del organismo. 

5. Agua o infusión

Evita alcohol, bebidas azucaradas.
Bebe agua, infusión o té.

Estas 5 condiciones, sin duda, mejorarán tu sesión de masaje terapéutico. Qué lo disfrutes!